FAQ: Preguntas frecuentes

¿Qué es la dieta cetogénica o muy baja en hidratos de carbono?
La dieta cetogénica es un régimen alimenticio basado en la restricción máxima de hidratos de carbono. En una dieta cetogénica, se ingieren menos de 20 gramos de hidratos de carbono diarios, mientras que la ingesta de proteínas se mantiene en un 10-15%. El resto de la energía proviene de las grasas, por lo que se trata de una dieta baja en hidratos de carbono, moderada en proteína y alta en grasas.
Esto obliga al organismo a entrar en un proceso denominado cetosis, en el que las grasas ingeridas en la dieta, y más tarde las almacenadas en nuestro cuerpo, se utilizan como fuente de energía. Su exceso puede ser expulsado por el aliento o la orina. La cetosis es un estado saludable y natural, que no implica riesgos de salud a corto ni a largo plazo, más allá del requerimiento básico de un período de adaptación (entre una y tres semanas en las que puedes encontrarte menos enérgico de lo normal). Aunque se comenzó a utilizar como un tratamiento para la epilepsia, la dieta cetogénica tiene una gran variedad de aplicaciones, especialmente en el tratamiento de la obesidad y la diabetes.

La dieta cetogénica debería ser el acercamiento primario para el control de la diabetes tipo 1 y tipo 2. (Estudio)

- Tengo diabetes, ¿Qué puedo esperar de una dieta cetogénica?

Si tienes diabetes tipo 1, tus necesidades de insulina pueden reducirse de forma dramática. Durante los primeros días tu hígado no convertirá la proteína en glucosa, por lo que tus necesidades de insulina rápida serán extremadamente bajas. Es necesario que seas muy consciente de que tus necesidades de insulina basal y rápida van a bajar dramáticamente, debiendo realizar cambios en las dosis. Al necesitar menos insulina, tus glucemias se volverán increíblemente predecibles, lo que mejorará tu control glucémico. Además, dejarás de tener hiperglucemias después de las comidas y tus hipoglucemias se reducirán.

Si tienes diabetes tipo 2, perderás peso y reducirás o llegarás a eliminar tu medicación.


¿Qué relación hay entre una dieta cetogénica y una dieta paleolítica?
La paleodieta es la denominación popular con la que se conoce al estudio de la nutrición humana desde un punto de vista evolutivo. Su objetivo es investigar qué clase de alimentos resultan más acordes para el consumo humano en base al desarrollo evolutivo de nuestra especie. Curiosamente, a pesar de que no existe una relación conceptual entre ambas, un gran porcentaje de los alimentos que se consumen en una se pueden consumir en la otra. De hecho, una dieta paleolítica puede ser de carácter cetogénico, y viceversa. El único requisito en una dieta cetogénica es mantener los hidratos de carbono por debajo de los 20 gramos diarios, lo que excluye el consumo de patatas o fruta, y obliga a la moderación con los frutos secos, la zanahoria, el tomate o el cacao. Si en una dieta cetogénica decidimos optar por alimentos naturales en lugar de aquellos procesados industrialmente, estaremos llevando a cabo una dieta paleolítica. 

- ¿Qué alimentos no deberíamos comer o están restringidos en una dieta baja en hidratos de carbono?
Pirámide Alimenticia de la dieta baja en hidratos de carbono.
Los defensores de este estilo de vida sostenemos que la gran mayoría de enfermedades metabólicas en nuestros días provienen del exceso de alimentos de mala calidad y derivados del grano y el cereal, que sobreestimulan la producción de insulina, retienen líquidos, afectan al cerebro y nos hacen sentirnos lentos y pesados. (Estudio)
En una dieta baja en hidratos de carbono evitarás comer cereal y grano, trigo (pan, pasta, avena, arroz…), azúcares, legumbres y otros alimentos procesados. 

- ¡Pero las legumbres y el pan son esenciales! Tienen mucho hierro y energía.
No es cierto. Son, en su mayoría, alimentos nutricionalmente vacíos. Las escasas vitaminas beneficiosas para el organismo que pueden poseer son obtenidas en mayor cantidad y biodisponibilidad a través de la verdura y la carne, entre otros alimentos naturales. No hay nadie que haya muerto por dejar de comer arroz. Por el ontrario, hay mucha gente que al dejar de hacerlo observa como sus niveles de colesterol y tensión arterial bajan radicalmente.

- ¿Cuál es la estructura general de una dieta baja en hidratos de carbono?

Una dieta baja en hidratos de carbono es una dieta alta en grasas, moderada en proteína y baja en carbohidratos. Estos últimos deberían provenir de la la verdura. Para estructurarla te recomendamos la Keto Calculator. 

- ¿Por qué es la dieta cetogénica saludable para un diabético?
Los carbohidratos son los principales responsables de elevar la glucosa en sangre. En una persona normal, cada vez que una cantidad de carbohidratos determinada se ingiere, el páncreas da una respuesta inmediata en forma de insulina. Una persona que produce poca o ninguna insulina, como es el caso de un diabético tipo 1 o un paciente avanzado de diabetes tipo 2, no tiene las herramientas necesarias para cubrir esa subida de glucosa en sangre. Aunque se tome insulina rápida de forma exógena, esta tardará unos 20 minutos en hacer efecto, y lo hará a un ritmo excesivamente lento durante 2-3 horas. Esto provoca una subida de glucosa en sangre postpandrial que a largo plazo es la causa de una enorme cantidad de complicaciones derivadas de la enfermedad. El Dr. Richard K. Bernstein explica de manera fenomenal este suceso en su libro Diabetes Solution.
Sin embargo, tan sólo un 30% de las proteínas que ingieres se transforman lentamente en glucosa, mientras que las grasas no afectan directamente a tus niveles. Las personas con diabetes que adoptan una dieta baja en hidratos de carbono mantienen sus niveles de glucosa en rangos muy parecidos a aquellas personas que no tienen la enfermedad, tienen una mínima incidencia de hipoglucemia y reducen la cantidad de insulina que toman a la mitad o incluso más. Además, controlar tu peso en una dieta cetogénica es francamente sencillo, por lo que tu resistencia a la insulina no debería darte demasiadas sorpresas.
En algunos casos de Diabetes Tipo 2 muy poco avanzada o prediabetes, hay pacientes que aseguran haber ‘revertido’ completamente la enfermedad.


- ¿Por qué estás dietas discriminan a los carbohidratos?
La dieta cetogénica utiliza las ventajas de reducir el consumo de hidratos de carbono para proporcionar grandes beneficios de salud. Ninguno de los acercamientos reseñados en este blog demoniza la ingesta de hidratos de carbono en sí misma, pues el problema de los carbohidratos comienza cuando empiezan a ingerirse en exceso (más de 150 gramos diarios en una persona sin diabetes), no cuando su consumo es el adecuado. 

- ¿Qué efectos produce el exceso de carbohidratos en la salud?
Cuando comemos un exceso de carbohidratos, es decir, más allá de lo que nuestro cuerpo necesita como fuente de energía, estos pasan a almacenarse como tejido adiposo (grasa corporal). Los carbohidratos en exceso provocan retención de líquidos, hiperinsulinemia, minan las capacidades cognitivas, inducen somnolencia… algunos expertos dicen que este mismo exceso puede provocar cáncer, demencia senil o alzheimer, siendo el centro del deterioro físico y mental que acelera el envejecimiento.  
Los carbohidratos pueden ser una auténtica droga. Estimulan la producción de adrenalina y nos provocan una felicidad inmediata al ingerirlos, con el consiguiente bajón una vez que han desaparecido de nuestro cuerpo. Nunca verás a un niño llorando por un filete de ternera, pero sí por un caramelo. Una vez que pasa este ‘chute de energía’, el cuerpo reclama más y en mayor cantidad. 
Estos motivos nos llevan a pensar que una persona sana (sin diabetes u obesidad) no debería sobrepasar los 150 gramos de hidratos de carbono diarios. 


- He adoptado esta dieta y me siento un poco falto de energía.
Es la Low-Carb Flu. No te preocupes, tardarás en adaptarte entre 5 días y 2 semanas, aproximadamente. Tu cuerpo está haciendo el ‘cambio definitivo’ para pasar a quemar grasas en lugar de carbohidratos. Cuando pase un tiempo, notarás que te sientes más enérgico, necesitarás dormir menos, no tendrás sueño después de las comidas y te sentirás activo, más concentrado y creativo.

- Pero si no como carbohidratos, no tendré energía nunca.
La molécula encargada de suministrarnos energía es el ‘adenosíntrifosfato’ (ATP). Un gramo de carbohidratos produce 36 moléculas de ATP durante un par de horas o tres, mientras que las grasas se digieren lentamente y producen 48 moléculas de ATP que pueden durarte más de 6 horas. ¡Es como si vivieras en una continua ventaja metabólica! (Estudio)

- Si todo esto es cierto, ¿Por qué mi médico dice otra cosa?
La ciencia cambia rápidamente. Aquello que se intentó comprobar como cierto en el pasado puede mostrar un resultado inverso en cuestión de años. A pesar de que la investigación demuestra que el enfoque bajo en hidratos de carbono es totalmente válido, este cambio aún no ha llegado a nuestros médicos de cabecera y endocrinos. El relevo generacional es cuestión de tiempo.
El gran fallo de la ciencia nutricional ha sido caer en la falacia conocida como petición de principio: ha partido de una conclusión cuya veracidad no está probada para inferir algunas premisas que, debido a que la primera conclusión es errónea, resultan falsas también. 
Durante mucho tiempo se ha creído que las proteínas dañan los riñones, mientras que las grasas son perjudiciales para las arterias. Lo único que nos ha quedado han sido los carbohidratos, y estos han sido el centro de nuestra dieta. Ahora estamos sufriendo las terribles consecuencias de haber seguido ese camino: una sociedad llena de enfermedades autoinmunes, ansiedad, depresión, obesidad, etc.  Para solucionarlo, hemos preferido tomar medicamentos inútiles en lugar de cambiar nuestros hábitos de vida.

- ¿Y no me dará colesterol o hipertensión?
No. La ingesta de grasas en la dieta no provoca un aumento de la circulación de lípidos en sangre, no es un factor de riesgo cardiovascular y no aumenta la presión arterial. (Estudio)

- ¿Es lo mismo la cetosis que la cetoacidosis?
No. Aunque la presencia de ambas se determina a partir de las cetonas en orina, la cetosis es producto de la ausencia de carbohidratos en la dieta y la quema de grasas como fuente de energía, y la cetoacidosis es signo de que la glucosa en sangre es muy alta y no hay insulina suficiente para lograr que los nutrientes que ingerimos alimenten nuestras células. Ocurre cuando, por ejemplo, un diabético olvida inyectarse su insulina durante un par de días. 

- Un diabético no puede vivir sin consumir hidratos de carbono.
Lo único que diferencia a un diabético de una persona sana es que su páncreas no produce insulina. Si una persona sana puede vivir sin hidratos de carbono, una persona con diabetes también. 

- El cerebro y otros órganos vitales necesitan hidratos de carbono para sobrevivir.
Falso. Lo que necesitan es glucosa, y para ello tenemos el proceso de gluconeogénesis. Ante la falta de hidratos de carbono, el páncreas sintetiza alrededor del 40% de las proteínas que ingerimos y las convierte en glucosa, por lo que ninguno de nuestros órganos se ve afectado. Algunos órganos funcionan con esta producción endógena de glucosa, y otros aprovechan la energía de los cuerpos cetónicos.


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